Las personas que trabajan en el sector artesanal y de la construcción enfrentan diversos riesgos durante su jornada laboral. Este sector se ve especialmente afectado por la adquisición de dispositivos PTA (Protección del Trabajador Aislado).

A continuación, presentamos varias razones que justifican el uso de estos equipos.

LOS RIESGOS PARA LOS ARTESANOS Y TRABAJADORES DE LA CONSTRUCCIÓN:

Los oficios artesanales y las tareas relacionadas con la construcción conllevan riesgos importantes, como:

• Riesgos de caídas desde altura: A menudo, se realizan trabajos en lugares elevados, lo que aumenta el peligro de caídas. Es esencial seguir las medidas de seguridad y usar equipos de protección personal (EPP) adecuados para reducir estos riesgos.
• Riesgos de descargas eléctricas: El uso de herramientas eléctricas en estos sectores puede provocar riesgos de electrocución. Respetar las normas de seguridad y usar el equipo de protección adecuado son fundamentales para minimizar estos riesgos.
• Riesgos de trastornos musculoesqueléticos: Las labores físicas intensas, como levantar objetos pesados o utilizar herramientas manuales, pueden causar problemas en las articulaciones. Mantener una postura adecuada y seguir las normas de seguridad en el lugar de trabajo son esenciales para reducir estos riesgos.
• Riesgos de accidentes laborales: Cuando un trabajador está solo y sufre un accidente, puede ser difícil solicitar ayuda o alertar a los servicios de emergencia. Por ello, es crucial contar con dispositivos que permitan una comunicación rápida en caso de necesidad.
• Riesgos de violencia: Trabajar solo en entornos públicos o privados puede exponer a los trabajadores a situaciones de violencia o acoso.

Para mitigar estos riesgos y sus consecuencias, puede ser crucial utilizar un dispositivo de alarma individual para trabajador aislado tipo “hombre caído”. Estos dispositivos permiten a los trabajadores solicitar asistencia rápida al presionar un botón de alarma (SOS) o de forma automática en caso de pérdida de verticalidad o ausencia de movimiento.

La protección del trabajador aislado está regulada por la regulación del Código del Trabajo, que establece la responsabilidad del empleador en garantizar la seguridad de sus trabajadores. Esto incluye la identificación de los puestos de trabajo aislados y la implementación de medidas de prevención de riesgos.

Los dispositivos de Protección de los Trabajadores Aislados (PTA) proporcionan tranquilidad tanto a los trabajadores como a los empleadores al limitar los riesgos y permitir una intervención rápida en caso de incidente. Es esencial que los empleadores informen a sus trabajadores sobre el uso de estos dispositivos y aseguren su cumplimiento. Además, una formación adecuada garantiza el correcto uso de estos equipos.

Equipar a los trabajadores con dispositivos PTA ofrece numerosas ventajas en caso de incidente, como la posibilidad de comunicarse con los servicios de emergencia, la detección de inmovilidad anormal y la intervención rápida en el lugar del accidente.

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